Instalaciones de Sinopec Group, tercera empresa con mayor facturación del mundo, de origen chino
Autor: Manuel V. Montesinos
Como consecuencia de la crisis actual se ha acelerado la transformación de las relaciones entre centro y periferia que se viene dando durante las últimas décadas a partir de los cambios en la división internacional del trabajo causados por el proceso de mundialización del capitalismo.
1.-La reconfiguración de la división internacional del trabajo
El análisis de los cambios en la división internacional del trabajo, una de las cuestiones más decisivas para comprender la economía mundial, nos alerta de la aparición, ya desde los años setenta, de una nueva división internacional del trabajo. Estas transformaciones estarían asociadas a la industrialización de la periferia (en las economías más grandes y dinámicas de América Latina y Asia oriental y meridional, como Argentina, Brasil, México, Corea del Sur, India o Taiwán, entre otras) y el traslado de industrias tradicionales desde los centros a los países periféricos. Ello confirma el desarrollo de la internacionalización productiva y la tendencia a la fragmentación y diseminación de los procesos productivos, de la que sin embargo están siendo excluidas amplias áreas de la economía mundial.
Podemos explicar la reconfiguración de la división internacional del trabajo a partir de tres aspectos:
- Superación de la división internacional del trabajo decimonónica y adopción de un carácter menos complementario de la nueva organización: la división del trabajo ya no está pensada para que las economías periféricas actúen como complemento de las centrales. Con la aparición de nuevos grupos transnacionales procedentes de las economías semiperiféricas, las pugnas entre capitales a escala internacional se han hecho más intensas.
- Aumento de la competencia entre los centros y las principales economías periféricas a partir de la extensión y profundización del proceso productivo a nivel mundial, favoreciendo la reproducción y acumulación capitalistas.
- Convergencia de las condiciones de desempeño del capital entre las diferentes áreas económicas, lo que ha tenido varias implicaciones: realización de amplios procesos de privatización, apertura y desregulación de los mercados; profundización de la orientación exportadora de las economías periféricas como eje de su proceso de acumulación y presión hacia el deterioro de los factores asociados al coste de la fuerza de trabajo en las economías centrales.
2.-Las relaciones centro-periferia
Estos cambios en la división internacional del trabajo están dando lugar a una redefinición de las relaciones entre centro y periferia que se plasma en distintos planos:
- Plano productivo: a medida que la internacionalización productiva se profundiza más y más, la productividad del trabajo en los países que participan en los circuitos transnacionalizados tiende a converger, mientras que las diferencias entre los costes laborales de los centros y la periferia se mantienen e incluso se amplían. Además, la reducción del coste laboral unitario en las periferias transnacionalizadas presiona a la baja los salarios en los centros.
- Inserción comercial externa: en las economías periféricas se mantiene al mercado mundial como eje de la acumulación de capital, pues se sigue dando una intensa penetración de importaciones, a pesar de su dinamismo y la baja-media intensidad tecnológica de sus exportaciones.
- Dependencia financiera y volatilidad cambiaria: los países de la periferia tienen cada vez más dificultades para acceder a recursos financieros externos ante el constante recurso a los mismos por parte de las economías centrales. Por otra parte, el proceso de liberalización y desregulación financiera que se viene dando durante las últimas décadas ha resultado en episodios de volatilidad financiera y cambiaria que ha perjudicado gravemente a los países periféricos.
- Distribución del ingreso: se han fortalecido las tendencias regresivas en la distribución de la renta, tanto a escala mundial como en el interior de las economías. Entre las causas se encuentran las mayores diferencias entre el crecimiento de los beneficios y los salarios y la disminución de las políticas sociales y de redistribución de la riqueza que el paradigma neoliberal dominante en política durante los últimos años ha provocado.
Como consecuencia de todas estas transformaciones, la economía mundial actual presenta una jerarquía geográfica en la que los centros capitalistas:
- Poseen empresas que catalizan la dinámica de acumulación a escala mundial y lideran los sectores de mayor crecimiento y complejidad tecnológica.
- Generan y modulan los más importantes cambios tecnológicos.
- Profundizan su diversificación sectorial y potencian su articulación productiva.
- Su inserción externa descansa en líneas de especialización de alto contenido tecnológico y valor añadido.
La periferia, por su parte:
- Se diversifica aún más, apareciendo diferencias cada vez mayores entre una semiperiferia muy dinámica (economías asiáticas de alto crecimiento y modernización capitalista o Brasil, exportadores de manufacturas de media-alta complejidad tecnológica), una periferia intermedia (algunos países latinoamericanos y algunos asiáticos, con cierto dinamismo industrial) y una periferia cada vez más irrelevante para la dinámica de acumulación mundial (África subsahariana, algunas economías de Asia meridional o Haití, sin recursos estratégicos, base productiva y reducidos mercados).
- La mayor o menor profundidad del carácter periférico de estas economías dependería de criterios como:
- Peso del mercado interno como eje de acumulación.
- Grado de articulación productiva interna.
- Complejidad del proceso productivo que se lleve a cabo en el interior.
- Complejidad tecnológica y valor añadido de las exportaciones.
- Grado en que la dinámica de acumulación genere empleos productivos.
CONTINUARÁ...
BIBLIOGRAFÍA
- RAMÍREZ CENDRERO, J.M: La reconfiguración de las relaciones centro-periferia como consecuencia de la crisis. En: II CONGRESO DE ECONOMÍA DEL DESARROLLO (2009: Málaga).
- Clases de Economía Mundial del Prof. Dr. Juan Manuel Ramírez Cendrero (Universidad Complutense de Madrid).