El comprador paga una comisión que se llama prima, y el precio acordado se llama en el argot financiero strike. La transacción se realiza en la fecha de vencimiento acordada (el plazo máximo de las opciones es de un año), pero el propietario de la opción tiene la posibilidad de revender el instrumento en el mercado financiero. Las garantías que se exigen normalmente son de hasta un 30% del valor nominal, por lo que hay bastante apalancamiento.
La opción puede ser tanto de compra (call) como de venta (put). En el primer caso lo que le interesa al comprador es que la cotización del activo sea más alta de lo acordado en la opción, porque así obtendrá lo mismo pero por menos dinero de lo que vale en el mercado. ¿Qué pasa si el día del vencimiento la cotización del activo es más baja que lo dicho en la opción? Simplemente el comprador no ejecuta su derecho a compra, pierde la prima, y si quiere adquiere el activo en el mercado por su cuenta.
Si la opción es de venta (put option), al comprador de la opción (de venta) le interesa que la cotización en el día del vencimiento sea lo más baja posible, porque el comprador de la opción podrá vender el activo por más de lo que vale en el mercado. Si la cotización fuera superior, el comprador no ejercita su derecho de venta y pierde la prima.
Ejemplo de opción call (de compra): A compra una opción call sobre Santander con vencimiento a diciembre de 2017 y strike de 20€. Paga una prima de 1€ por acción, por lo que le sale por un total de 100€, ya que las opciones se venden en "packs" de 100 acciones. Recibe esos 100€ del vendedor, que se compromete a vendérselas si en la fecha del vencimiento la cotización del Santander es superior a 20€. Si en diciembre la cotización está a 25€, el comprador ejecutará su opción de compra, porque comprará las acciones baratas y las venderá en el mercado financiero por un precio superior. Así, ganará 5 x 100 acciones = 500, que restando la prima se quedará en 400€ de beneficio.
Ejemplo de opción put (de venta): Si llegado diciembre la cotización del Santander es de 30€, al comprador no le interesará ejercer la opción de venta, ya que podría vender las mismas acciones por un precio superior en el mercado. Pero si la cotización es de 10€, el comprador ejercitará la opción para poder vender las acciones por 20€, el doble que lo que le ofrece el mercado. Su beneficio sería 20 x 100 = 2000 - 100 (prima) = 1800. El comprador de la opción (sea de compra o de venta) es quien corre con los gastos de la prima.
Como suele ocurrir con los derivados, la inmensa mayoría de las opciones se utilizan o bien para especulación o bien para cubrir el riesgo de otra operación, son muy pocas las que llegan a la fecha de vencimiento. Las opciones pueden ser americanas (ejecutables en cualquier momento) o europeas (solo llegado el vencimiento).
Además, dependiendo del precio del activo distinguiremos opciones out of the money (OTM) cuando el precio de ejercicio de la opción es superior al del subyacente (si la posición es call) o si es inferior (en caso de que sea put). En las opciones at the money (ATM) el precio de ejercicio coincide con el del subyacente. Tanto las opciones out of the money como at the money tienen un valor intrínseco nulo. En las in the money (ITM) el precio de ejercicio es inferior al del subyacente (si es call) o superior (si es put). El valor intrínseco de las opciones ITM será la diferencia entre los dos precios.
Además, dependiendo del precio del activo distinguiremos opciones out of the money (OTM) cuando el precio de ejercicio de la opción es superior al del subyacente (si la posición es call) o si es inferior (en caso de que sea put). En las opciones at the money (ATM) el precio de ejercicio coincide con el del subyacente. Tanto las opciones out of the money como at the money tienen un valor intrínseco nulo. En las in the money (ITM) el precio de ejercicio es inferior al del subyacente (si es call) o superior (si es put). El valor intrínseco de las opciones ITM será la diferencia entre los dos precios.