Fuente: www.unipymes.com
Autor: Manuel V. Montesinos
A la hora de medir el peso de una economía en el mundo, se suelen utilizar indicadores como el porcentaje sobre el PIB mundial que ésta supone o sus cifras de exportaciones. Pero también se puede emplear el número de empresas transnacionales procedentes de ese país, las cifras de inversión extranjera directa u otras medidas de su posición dentro de la división internacional del trabajo.
Pues bien, vamos a centrarnos en los últimos conceptos, en las empresas transnacionales y en la IED (inversión extranjera directa). Las corporaciones multinacionales son las que llevan a cabo procesos de internacionalización productiva, comercial y financiera. Para actuar a escala mundial recurren a la IED, inversiones con carácter permanente en países distintos al de origen a partir de las cuales realizan actividades económicas.
La IED tiene un carácter productivo, no como la IEC (inversión en cartera), con carácter financiero. Las funciones de ambos tipos de inversión son:
IED
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IEC
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Fusiones y adquisiciones.
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Compraventa
de activos financieros
(bonos, acciones, derivados…).
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Ampliación
de la capacidad
productiva.
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Realización
de inversiones.
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Préstamos a largo
plazo entre empresas
del grupo.
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Reinversión
de beneficios.
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Para distinguir mejor entre ambas, el FMI establece como criterio de diferenciación en la adquisición de acciones el 10%: si compramos más del 10% de las acciones de una empresa estamos realizando una IED. Menos del 10% es IEC.
Nótese también que lo que marca la diferencia entre lo que es y no es IED es el domicilio fiscal del que la realiza. Si el inversor está domiciliado fuera del país que recibe la inversión es IED. Si no es así, no es IED (un inversor extranjero domiciliado en España no realiza IED).
Por otro lado, al estudiar la IED hay que distinguir entre las entradas (inflows, inversión recibida) y las salidas (outflows, inversión emitida). Asimismo, es posible hablar de flujos y stocks de inversión. Al observar datos con estas magnitudes podemos ver cómo las economías periféricas invierten cada vez más en las centrales, aunque tradicionalmente han sido estas las que más han invertido, y así sigue siendo, mientras que las periféricas son las que más inversiones han recibido y siguen recibiendo.
Profundizando un poco más en los datos sobre IED y ETN recogidos en las balanzas de pagos del FMI y las estadísticas de la UNCTAD, podemos observar varios fenómenos:
- Durante los últimos años ha crecido la importancia de las empresas transnacionales en la economía mundial. El número de fusiones y adquisiciones, ventas de filiales, PIB procedente de filiales o exportaciones de filiales han aumentado de forma considerable durante las últimas tres décadas.
- El stock de capital extranjero se concentra en los países desarrollados. Estos son los principales emisores de capital extranjero, aunque la inversión en el extranjero de los países en desarrollo se está incrementando con la aparición de grupos transnacionales originados en estos (caso del sudeste asiático). Mientras tanto, la inversión de los desarrollados está descendiendo.
- También los países desarrollados son los principales receptores de IED, aunque los países en desarrollo acumulan cifras cada vez mayores de nuevo (China, sudeste asiático, América Latina, Caribe).
- Tres son los fenómenos que participan en la reorientación de los flujos de la IED: la transformación de los antiguos países comunistas en economías de mercado (presentan ventajas para las ETN), los procesos de integración regionales (Unión Europea), la mayor apertura de grandes mercados emergentes (importantes focos de atracción de multinacionales. También crean sus propias transnacionales) y los tratamientos fiscales favorables al capital extranjero que tienen algunos países (paraísos fiscales).
- En cuanto a su organización sectorial, durante las últimas dos décadas ha crecido la IED destinada al sector servicios, principal foco de inversión, mientras que en segunda posición se sitúa el sector manufacturero, cuyas cifras han caído. El tercero es el sector energético, cuyas cifras mundiales también han crecido.
- La IED en países desarrollados se concentra en sectores de alta tecnología y reputación en el mercado (finanzas, energía, maquinaria, automóvil, servicios a empresas, telecomunicaciones…), tratando de aprovechar las ventajas que suponen mercados amplios y concentrados. Por el contrario, en los países en desarrollo la IED se destina a la explotación de recursos naturales y sectores más intensivos en mano de obra (minería, textil, transporte…), buscando costes laborales bajos y legislaciones medioambientales más permisivas.
CONTINUARÁ...
BIBLIOGRAFÍA
- TURRIÓN, J.; VELÁZQUEZ, F.J. (2013): La inversión extranjera directa y las empresas multinacionales, en ALONSO, J.A. (Dir.): Lecciones sobre economía mundial, Thomson-Reuters / Civitas, Cizur Menor.
- UNCTAD (2014): Informe sobre las inversiones en el mundo. Panorama General, Ginebra.
- Clases de Economía Mundial del Prof. Dr. Juan Manuel Ramírez Cendrero (Universidad Complutense de Madrid).